Alemania legaliza el espionaje
Alemania se ha convertido en un país firmemente comprometido con la seguridad de sus ciudadanos. La vinculación de esta nación al espionaje es casi obligada echando la vista al pasado. La Gestapo y la Stasi desempeñaron una ardua labor espía con sus habitantes y con gobiernos extranjeros. Recientemente, el estado germano ha aprobado una ley que regulará el funcionamiento del servicio federal de inteligencia: BND. Así se afirma en la plataforma online de noticias DiarioCórdoba. La polémica ley ha levantado ampollas en la oposición, pues ésta legaliza el espionaje alemán sobre países de la UE. Como se enuncia en la web de Público, el cambio legislativo tiene bastantes detractores. Por ello, el Parlamento alemán creará un organismo independiente que regule las prácticas de dichos servicios. Este comité contará con tres miembros. Éstos serán dos jueces y un fiscal del Tribunal Supremo alemán, como añade la página online de ElDiario.
Cambio legislativo pro espionaje
El Bundestag, la cámara baja alemana, ha aprobado un cambio legislativo que aumentará el control de los servicios secretos germanos. Esta llega tras la polémica acerca de la presunta vinculación del BND con la NSA acerca del espionaje masivo estadounidense. La nueva ley regula las prácticas de la agencia y permite espiar a individuos e instituciones extranjeras. Entre éstas se incluye a otro gobiernos de la UE. Para llevar a cabo la labor de vigilancia de los servicios se propone la creación de un organismo independiente. Este último estará formado por dos jueces y un fiscal del Tribunal Supremo. El objetivo de la variación legislativa es detectar posibles atentados en el viejo continente y dentro de las fronteras alemanas. Se interceptarán las telecomunicaciones internacionales, dejando de lado las conversaciones del pueblo alemán si el organismo regulador no lo requiere. De esto último duda la oposición, que se ha pronunciado contundentemente.
El espionaje permitido
Las agencias de inteligencia cuentan con los conocidos como selectores. Éstos forman una base de datos, como números
telefónicos o correos electrónicos, que pueden ser utilizados en caso de sospecha. Gracias a dicha información se resuelven crímenes o se localiza a sospechosos de delitos, pero también tienen su lado oscuro. La nueva legislación alemana brinda acceso al BND a este festín de información. Los datos virtuales no serán privados, teme la oposición. Por ello, este cambio de ley ha encontrado numerosos detractores. Para evitar el atentado a la intimidad de la ciudadanía, la Cancillería informará al organismo regulador de las principales misiones. Muy en especial aquellas desarrolladas en el extranjero, más concretamente si son en naciones de la UE. Este tipo de asuntos solamente se desarrollarán por motivos de seguridad nacional interna y externa. Con todo ello se pretende evitar la vulneración de los derechos civiles y encarar al terrorismo.
Las voces en la oposición
Esta nueva ley ha sido rechazada por todos los partidos en la oposición, y sólo los dos gobernantes la aprueban. Konstantin Von Notz la ha definido como “ una vulneración a la seguridad jurídica”. Afirma que hace accesibles las comunicaciones privadas y viola la Constitución de Alemania. Y es que defiende que si el BND no espiase de forma ilegal, no haría falta legalizar sus prácticas. Martina Renner, del partido Die Linke, se pronunció en contra. Anunció que la ley era un peligro para la democracia y hacía a la nación indigna de considerarse democrática. Amnistía Internacional ya recoge firmas para que sea derogada. Incluso se ha pensado en ser llevada al Tribunal Europeo de Justicia. Empresas privadas de telecomunicaciones también han dado queja de la reforma. DE-CIX, el mayor operador de puerto de conexiones a internet, tiene sede en Alemania. El BND controlará el 20% del flujo de información.